Tamara de Lempicka

jueves, septiembre 08, 2005

Olvidar y crecer


Ayer fui plenamente consciente de ello. Creo que esto es lo último, que ya no lo necesito más. ¿Eso es que crezco? ¿Qué maduro? ¿o que simplemente me he cansado de sufrir? Si la respuesta a ésta última pregunta es sí, me planteo que he sufrido casi por voluntad propia.
Aun así, me resulta indiferente. ¡Que sí, que me da igual!Parece que no lo entiendes. Te olvidé, pero no como otras veces en las que volvias a mi cabeza y pensaba que, realmente, no quería que te marchases de ahí, se me olvidaba recordarte pero cuando volvias me hacias feliz.
Ya no. Ahora sonrio.
Y lo mejor de todo. Me gusta.

6 comentarios:

Jefe dijo...

No dejes que ningun recuerdo borre esa sonrisa... mira a tu futuro que es bonito, prometedor y como no, estresante jajaja.
Suerte y ha seguir creciendo como persona, eso nunca hay que dejar de hacerlo!!!

Anónimo dijo...

besotes

Anónimo dijo...

pues nada disfruta mientras dure... hasta que vuelvas a caer

pebelcita dijo...

Como duele recordar, a veces. ayy!

Anónimo dijo...

Para olvidar hay que recurrir al viejo dicho, "un clavo saca otro clavo"...
bsos

Anónimo dijo...

Me alegra si piensas asi, es dificil olvidar cuando has querido mucho, o cuando piensas q ya esta olvidado y derepente vuelve...pero bueno,parece q tdo acaba pasando y nose donde lei una vez algo asi como que "para saber lo q es la felicidad hay q sufrir primero"...vamos,que si no lo pasamos mal, el dia q estemos bien no lo sabremos valorar.