Tamara de Lempicka

miércoles, abril 27, 2005

sobresaltada

El casancio pudo conmigo y caí rendida en el sofé. NO creo que mi sueño no duró mucho y estuvo interrumpido por medias conversaciones de las que tengo consciencia pero no recuerdo. En medio de una de ellas desperté de pronto. No se si hablaba con alguien en mi sueño o en mi realidad es caso es que fué como si recordase algo horrible , y mi cuerpo fue invadido por un nervio que lo recorría desde los pies hasta lo mas alto de la cabeza. Cómo cuando despiertas pensando que llgas tarde a un examen. Cuando estabas toda la noche de reyes dando vueltas en la cama esperando con impaciencia los millones de regalos que deseabas; ácababamos cayendo de puro cansancio.
Es una sensacion que desgasta y vacia, es expulsar el ultimo soplo de aire antes de reacionar ante la realidad... es ... confuso.

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