Tamara de Lempicka

jueves, marzo 02, 2006

Salió!

Intentó mantener los pies en la tierra y que su orgullo de reina y su corazón de mujer herida no dominasen sus tomas de decisiones:
-La mujer no es débil! Nadie en mi presencia ha de atreverse a decir , si siquiera a pensar en la debilidad de la mujer. YO obro como rey .

Pero no pudo dominarse, la engañaron, se engañó, creyó, titubeó y cayó con la misma rapidez que la cabeza de su enemiga perdiendo a sus consejeros y a su amante.
El puñal debía haber llegado a su corazón en alguna de las ocasiones en las que intentaron acabar con ella pero por suerte(o por desgracia) le salvaron de nuevo la vida.

Isabel I de Inglaterra y el Conde de Leicester antes de llegar al Castillo de Fotheringay a ver a Maria Estuardo

4 comentarios:

Isthar dijo...

Guapaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa

Qué pena no haber podido verte :)

Zifnab dijo...

Juro que iba a acudir

y a última hora una llamada

Y sigo siendo invisible

Lo siento

TORO SALVAJE dijo...

Felicidades, muy bonito.

Eurídice dijo...

GUAPAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!!