Después de coseguir despegar las pestañas con un café más cargado de lo habitual, he decidido poner musica mientras juego(cómo en la guardaria) a recortar papeles y pegarlos, cómo los "collage" del colegio pero está vez fijándome en qué recortaba y donde lo pegaba , sin usar para nada lo más divertido de todo, la creatividad y esa concepción artística tan personal que tienen los "enanos". Esto es así, y punto. He puesto música para intentar no aburrirme, aunque sea intentarlo, y ha caído un disco de Bossa Nova, que he traído para copiar al bueno de Txus. De repente me he acordado de Gala y de dónde lo compramos. En un puesto en Candem Town en un soleado domingo de agosto del 2001. Recuerdo a los vendedores brasileños, la mezcla de olores que Juantxo tanto odiaba y el baile con me eché con Gala ante la incrédula, aunque acostumbrada, mirada de nuestros acompañantes... Creo que ya es hora de que hagamos el cambio. Compramos dos discos y este ya me lo se de memoria.
1 comentario:
Londres.Q ciudad!La música no comprende de verguenzas.Te llega y no
puedes dejar de sentirla;a veces hace daño y entonces parece que estás más
vivo.Ahora la músic s ade+ un sedante xa pasar las horas en el metro,el
curro o el médico.1 poción contra la soledad y el ritmo loco.
GALA
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