bipolaridad

Creo que nunca había estado tanto tiempo sin escribir en el blog. Tampoco me había parado a pensar que sí, que hay gente que a veces me lee y que ya me han dicho que qué pasa que por qué no escribo.

Se me han quitado las ganas de escribir y publicarlo. Necesito volver al papel, a mi pluma(aunque suene romantico, antiguo y pedante), a escribir sin inventar historias, solo escribir lo que me sale sin pensar demasiado.

Ya he encontrado mi "hogar", tengo un compañero de piso adorable y sigo sin encontrar mi espacio.

Suerte, y trabajo. Hemos conseguido que nuestra obra con la que llevamos tanto trabajando, ha sido programada en los veranos de la villa de Madrid. ¡Genial! notición para todos. Pero aún así, sigo sin sentirme hubicada.
No se si es porque sigo con una lesión que me ha hecho parar mi ritmo, que tampoco era excesivo, y me hace sentir muy frustrada. Porque creo que no hay forma mejor para hacer las cosas, y si la hay, yo no la encuentro. Porque me comen las palabras por dentro, porque me abrasa la piel por fuera.

El caso es que me siento desplazada de ese círculo que a día de hoy es mi vida, y no porque me desplacen sino porque tengo mucha mucha mucha envidia, sana supongo, pero envidia.

Y un dia soy tan feliz con mi "nueva vida" y otros , como hoy, solo quiero tirarme en el sofa a dormir pero me despiertan llamadas telefónicas inesperadas.

En fin, que cuando, tiempo atras, escribía sobre la bipolaridad, me reía al decir que yo algo de bipolar tenía seguro. Pero ahora me lo empiezo a plantear de verdad. Cambios de humor que me están volviendo loca. Supongo que , cómo todo, es pasajero.