Intentó mantener los pies en la tierra y que su orgullo de reina y su corazón de mujer herida no dominasen sus tomas de decisiones:
-La mujer no es débil! Nadie en mi presencia ha de atreverse a decir , si siquiera a pensar en la debilidad de la mujer. YO obro como rey .
Pero no pudo dominarse, la engañaron, se engañó, creyó, titubeó y cayó con la misma rapidez que la cabeza de su enemiga perdiendo a sus consejeros y a su amante.
El puñal debía haber llegado a su corazón en alguna de las ocasiones en las que intentaron acabar con ella pero por suerte(o por desgracia) le salvaron de nuevo la vida.
Isabel I de Inglaterra y el Conde de Leicester antes de llegar al Castillo de Fotheringay a ver a Maria Estuardo
CUM LAUDE ZOTE : CARLOS MOZÓN
Hace 2 semanas.
4 comentarios:
Guapaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
Qué pena no haber podido verte :)
Juro que iba a acudir
y a última hora una llamada
Y sigo siendo invisible
Lo siento
Felicidades, muy bonito.
GUAPAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!!
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