Tamara de Lempicka

jueves, agosto 31, 2006

DESEOS


En la radio suena una canción de Christina Aguilera(lo se, no se que hago escuchando esto, pero repito que es la radio) . Fue su primer single del primer disco: genio en una botella o algo asi.
Deseos.

Entramos en el mes de septiembre con proyectos, con trabajo, con cosas que ójala salieran y que algunos no quieren ni oir hablar sobre ellas hasta que de verdad salgan y si salieran... ay! si salieran! Económicamente no me aportarían más que mi curro actual, pero lo dejaría todo por ello.

En fin, eso, proyectos y más proyectos. Te encuentras que uno te dice que quiere hacer contigo algo que antes ya dijo a otro, pero eso no te lo cuenta, pero antes te lo habia contado el otro, pero en el fondo no te importa. En fin más proyectos que hacen que el tiempo libre no exista pero que me llene una sensación general de buen rollo personal.
Trabajo, supongo, y más si es en lo que te gusta.

No me quejo. Hacía mucho que no me quejaba (bueno...si, pero poco), creo que es por falta de tiempo para pensar en algo que no sean proyectos o en mi misma, que, a ratos, es muy necesario.

Deseo tantas cosas... Pero no creo ni en los genios, ni en la suerte, ni en el destino como únicos manipuladores de la vida. (bueno en los genios si creo a veces, y en la suerte , pero solo de forma puntual. Si fueran siempre "ellos"¿de quién dependería mi vida?). Así que si me he decidido a no creer en todo esto no me puedo permitir sentarme en un sofa a verlas venir y a esperar que se cumplan mis deseos.

Y lo que deseo sobrevivir gracias a lo que me apasiona.

lunes, agosto 28, 2006

Aventuras míticas

En un mundo donde las minas, los zigurats, se mezclan con esfinges y bailarinas "del vientre". Con música de cascabeles que se meten en el agua, encontré, el sábado, un barco pirata donde los "malos" bebían ron y raptaban a la india más bonita. Tres hermanos volaban despues de encontrar la sombra del capitán de los niños perdidos, que esperaban en Nunca jamas, soñando con tener un madre. Bailaban , cantaban , y yo no pude evitar emocionarme al ver a un londinense bailando, a el más guapo de los niños perdidos, al pirata hiperactivo y a un indio que quiso que todos nos convirtieramos en "pieles negras". Entre las lágrimas y la pintura, era yo quien parecía Garfio.
Como se rieron los que vivieron conmigo la aventura...
Supongo que es eso que dicen que se siente cuando se cumplen los sueños , que algo dentro estalla y por eso se llora, se rie, se sienten. Empatizar es algo que me ha hecho agobiarme siempre, puesto que soy propensa a ello, pero en este caso no me podía sentir más contenta, al ver a una de las personas que más quiero, subido en ese escenario, consiguiendo el primer gran paso hacía el sueño común. Y allí estabamos nosotros 4, compañeros en un viaje cuasi-improvisado donde la risa y las bromas no nos han dejado casi respirar.
Ha sido increible. Demasiado para solo dos días. Demasiado para solo unas líneas.

http://amaratamtarama.blogspot.com/2005/08/peter-pan.html

viernes, agosto 25, 2006

espiral


Y asi estoy, y asi me siento.
No sabría describirlo. Admito elucubraciones. Y volvemos al círculo de siempre: los significados "personales" y la subjetividad implícta.
Besos

miércoles, agosto 23, 2006

Información objetiva

Despues de estar luchando con el sueño que empujaba mis parpados para que cayera dormida (6 horas de trayecto de vuelta) llego al trabajo con ganas de aparcar todo por unos dias y quedarme como la niña del relato anterior y, como bien decia Bito, sentarme y ver pasar a los demas.

Creo que muchas de las cosas que hago que la gente califica de "locuras" son cosas que o hago ahora o no voy a hacer nunca: Escaparme antes del trabajo para coger un autobus de madrid campoamor(alicante), actuar a las 12 de la noche en un bar en el que no pagaban en exceso, liar a un chico (para el que curro como técnico de sonido) que andaba por la zona para que adelante su vuelta de vacaciones y me traiga saliendo de alli a las 2 de la mañana , llegar a Madrid a las 7:40, duchazo, 20 minutos escasos de sueño y de vuelta a la oficina con cara de "fantastica" para seguir con un curro de cuasi-oficinista que al menos me reporta algun beneficio económico que si no...
Entre tanto mis vacaciones terminaron hace ya casi 3 semanas en las que (al menos un dia de cada una de ellas) he hecho una locura de estas de irme al fin del mundo y volver de noche. Como actriz, como técnico de sonido, o como hermana para dar sorpresas en dias festivos. Porque creo que este es el momento de hacerlo y me gusta lo que hago, disfruto con ello a pesar de las quejas que en ocasiones pueda tener.

Lo único que enturbia este sentimiento de relativa felicidad es que, con todo lo que me gustaban a mi las mascaras, voy descubriendo que la gente y muchas de las caras que enseñan son mas falsas que las monedas de tres pesetas y tienen más maldad dentro que uno que tenía mucha(dicho popular). Igual es porque he aprendido a desconectar, a poner el OFF de vez en cuando par escuchar lo que me cuentan e intentar que la parte de mi cerebro encargada de asumir la información deje de funcionar. Asi no aconsejo(no suelo ni solía hacerlo, no me gustan los consejos gratuitos y no solicitados), y mis "relaciones humanas" se mantienen lo más imperturbables posibles por agentes externos.
El caso es que la información, las transmisión de esta es tan cambiante... en la facultad me enseñaron o intentaron enseñar muchas cosas y la palabra objetividad me la grabaron a fuego. Pues por si alguno no se habia dado cuenta aún: NO EXISTE. No la busqueis que no la vais a encontrar y la misma historia contada por don pepito, no tiene nada que ver con la que ayer me contó don josé.
Asi que asi me quedo , con información almacenada que igual no debía haber sabido nunca pero que creo que aun no he asimilado.
Asi estamos, asi nos quedamos, pero yo... sigo sintiendome bien.

jueves, agosto 17, 2006

Tira soga


Tenía el estómgao envuelto en una cuerda muy áspera que la zarandeaba de lado a lado sin rumbo fijo, pero con una presión que hacía que los nervios que se habían congregado ahí abajo, se agolparan en su garganta.
Si fuera tal y como ella decia, si se hubiese afianzado en ese cambio no sentiría esa fuerza que le impedía moverse . En el fondo ella creía entender por qué la cuerda había decidido que iba a acompañarle: para agarrarla un poco si sus piernas flaqueban.
Por el camino a lo que sería su vida, a lo que le daba madurez, donde los pasos iban profundizando y marcando en pasillo que pisaba, las piedras, los muros y las mariposas que se posan cuando menos te lo esperas, aguardaban escondidos tras los árboles.
En el fondo da lo mismo saltar esos obstáculo si la cuerda no te deja seguir.
Un solo tropezón, si la pillas despistada, hace que te caigas y no tengas tiempo ni de apoyar las manos. Es parte del camino.
Ella se cayó, se hizo daño muchas veces pero siguió, pero cuando ya veía que el final estaba allí creyó que estaba ya en su casa, en su vida, en su meta y fue cuando quiso aumentar un poco la marcha, la cuerda se relajó y las piedras(en el fondo), estaban orgullosas. Pero una de ellas se alío con la dejadez que en ese momento colgada de sus tobillos y hizo que cayera.
Por confiada.
Y hoy está sentada en el suelo y de vez en cuando gatea para buscar una sombra o algo caídoen el suelo, con lo que jugar, o charla con los paseantes tranquilos que siguen y adelantan. Y les mira con envidia porque ella no puede levantarse. En el fondo no quiere, tira la toalla, al menos por un tiempo y decide descansar , decir lo que quiera, hablar como quiera, llorar cuando y por lo que queria, criticar, maldecir, sonreir, y arreglar el mundo sentada bajo un árbol hasta que quiera continuar, que será(probablemente) en un par de horas, pero ella no lo sabe. Entre tanto, está tranquila.

jueves, agosto 10, 2006

oxígeno líquido

El sueño era profundo, yo no era consciente pero estaba descansado acariciada por la brisa que bailaba entre los árboles. Es probable que llevase meses sin descansar. Durmiendo sí, pero no descansando.
Me acomodé sobre mi brazo izquierdo y me acurruqué conmigo misma mientras el sol se colaba entre las hojas y a veces me besaba la cara.
Poco despues me encontré en el borde de un desfiladero dejándome sujetar por el viento que impedía mi caída. Una mano acarició mi cintura y suavemente me acompañó al vacío de la caída que daba a un mar picado por el mismo aire que antes me sujetaba y que se peleaba contra las rocas.
Caí en él y me sumergí pero sin mojarme ni una gota. Estaba dentro de una burbuja oxigenada que buceaba entre las olas y su furia y que me llevaron contra las rocas. Estas se abrieron para dejarme entrar en una cavidad oculta para la vista humana desde un lugar que no fuera el propio mar.
La burbuja estalló para dejarme tendida en la humedad de las rocas si aparente salida a la vista y donde el mar entraba para mojar mis pies. Unas manos de sal me deslizaron sobre las aristas de las rocas haciendo que mi ropa se rasgara pero sin que yo sintiera el dolor.
No se porque no me dolia nada, no sufría, solo me dejaba llevar por en vaivén de las corrientes. que me hicieron dormir otra vez y me depositaron de nuevo bajo ese árbol que veleba por mis paseos en sueño.
La misma mano que me empujaba antes, me acariciaba la cara para despertar y yo, estaba tranquila.




domingo, agosto 06, 2006

Reencuentros viajeros

La ciudad prometía diversión y disfute desde el primer momento. El viaje habia sido un poco precipitado pero asi le gustaban a ella las cosas. Solían salirle bien.
La compañía tambien iba a ser perfecta, era perfecta. Se conocian de toda la vida y ese viaje les iba a unir un poco más.
Él era divertido, amaba el arte y llevaba un año en la ciudad estudiando alemán. Ella siempre sonreía y tenía muchas ganas de verle de nuevo.
Ya desde el reencuentro algo distinto pasó entre ellos. Los primeros dias estuvieron llenos de paseos, arte, música y parques. Pero una de las noches en que aparecieron por casualidad en un concierto en un bar habitual, sin saber muy bien porque Berlin les hizo suyos.
La vuelta a casa no hablaban, me metieron las manos en los bolsillos y pensaron, sin saberlo, en que esa persona que tenían al lado no era la misma de la que se despidieron un año antes.
Sin haber cambiado por completo algo nuevo existia.
Un aroma de atracción hizo que segun abrieran la puerta de la pequeña casa compartida, vacía ese fin de semana, su ropa volase y se perdiese en los rincones del apartamento para dejar paso a los instintos y a la pasión más pura y a que cayera el muro que les habia separado todo ese tiempo.
Las caras cambiaron, las manos se entrelazaron y el sudor elimino todo lo que esa noche sobraba. A las 5 de la mañana volvieron a ser conscientes. Se miraron , se abrazaron y se dieron un beso de despedida y el muro volvió a crecer.
(a una ciudad inspiradora)